El pasado viernes me encontré rodeado de personas con profesiones e inquietudes totalmente distintas, desde apasionados creativos publicitarios a malabaristas de la gestión de proyectos. Todos ellos deseosos de comunicar eficientemente. Todos ellos interesados en dejar de hacer presentaciones del montón -las que todo el mundo hace- para vender más, implicar mejor en un cambio…