Cuando llega, todos queremos explicar la crisis con un muy mesurado mensaje de tranquilidad porque sabemos que la alarma no lleva a ningún buen destino. Pero la gente realmente no escuchará palabras. Escuchará emociones.
Como ejemplo reciente, los organismos oficiales han explicado repetidamente al público que el virus del Ébola solo puede infectar a través del contacto directo…